Moneda conmemorativa Piedra Movediza de Tandil, Argentina
El gobierno del Municipio de Tandil diriguido por Miguel Lunghi propone acuñar una moneda conmemorativa de los cien años de la caída de la Piedra Movediza. Ya estaría trabajando un artista local en el proyecto gira en torno a unos de los hechos más notorios de la historia local ocurrido el 29 de febrero de 1912.
No se trataría de un hecho aislado ya que en los últimos años se han multiplicado los casos de comunidades u organizaciones que promueven homenajes, reconocimientos o festejos a partir de este mecanismo.
Entre las facultades del Banco Central de la República Argentina, se encuentra la de efectuar emisiones especiales de monedas, con el fin de "homenajear a personalidades destacadas de nuestro país, así como conmemorar aquellos hechos históricos que trascienden hasta nuestros días".
Estas emisiones especiales, que se acuñan siempre en cantidades reducidas, pueden ser distinguidas en dos clases: monedas de curso legal forzoso con diseños diferentes de las de uso corriente y monedas de curso legal no forzoso destinadas al coleccionismo numismático.
El propósito requiere de un proceso administrativo y legal previo que no es menor. Hasta ahora poco ha trascendido de esta iniciativa municipal y de los actos previstos para recordar los cien años que distan de la caída de la mole de 300 tonelada que dio fama a la ciudad pero también un ícono que aún hoy la representa dentro y fuera del país. Pero se estima que no será una conmemoración menor la que prepara la Comuna para el mes de febrero.
La Piedra Movediza de Tandil fue una roca de aproximadamente 300 toneladas que se localizaba en la ciudad bonaerense de Tandil. La particularidad de dicha mole de granito fue que logró mantenerse en equilibrio al borde de un cerro hasta el día de su caída definitiva, el jueves29 de febrero de 1912 entre las 5 y las 6 de la tarde (sin haberse podido determinar el momento exacto) y aparentemente sin testigos directos en el preciso momento de su derrumbamiento.
Se cree que su caída fue un acto de vandalismo o producto de las vibraciones provocadas por las explosiones en las canteras cercanas.
La piedra original se encuentra en la base del cerro, partida en tres grandes pedazos. Desde 2007 existe una réplica ubicada exactamente en el mismo lugar, siendo el mayor símbolo de la ciudad de Tandil. El predio recibió el nombre de Parque Lítico La Movediza.
No se trataría de un hecho aislado ya que en los últimos años se han multiplicado los casos de comunidades u organizaciones que promueven homenajes, reconocimientos o festejos a partir de este mecanismo.
Entre las facultades del Banco Central de la República Argentina, se encuentra la de efectuar emisiones especiales de monedas, con el fin de "homenajear a personalidades destacadas de nuestro país, así como conmemorar aquellos hechos históricos que trascienden hasta nuestros días".
Estas emisiones especiales, que se acuñan siempre en cantidades reducidas, pueden ser distinguidas en dos clases: monedas de curso legal forzoso con diseños diferentes de las de uso corriente y monedas de curso legal no forzoso destinadas al coleccionismo numismático.
El propósito requiere de un proceso administrativo y legal previo que no es menor. Hasta ahora poco ha trascendido de esta iniciativa municipal y de los actos previstos para recordar los cien años que distan de la caída de la mole de 300 tonelada que dio fama a la ciudad pero también un ícono que aún hoy la representa dentro y fuera del país. Pero se estima que no será una conmemoración menor la que prepara la Comuna para el mes de febrero.
La Piedra Movediza de Tandil fue una roca de aproximadamente 300 toneladas que se localizaba en la ciudad bonaerense de Tandil. La particularidad de dicha mole de granito fue que logró mantenerse en equilibrio al borde de un cerro hasta el día de su caída definitiva, el jueves29 de febrero de 1912 entre las 5 y las 6 de la tarde (sin haberse podido determinar el momento exacto) y aparentemente sin testigos directos en el preciso momento de su derrumbamiento.
Se cree que su caída fue un acto de vandalismo o producto de las vibraciones provocadas por las explosiones en las canteras cercanas.
La piedra original se encuentra en la base del cerro, partida en tres grandes pedazos. Desde 2007 existe una réplica ubicada exactamente en el mismo lugar, siendo el mayor símbolo de la ciudad de Tandil. El predio recibió el nombre de Parque Lítico La Movediza.
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